Según lo manifestado por Edith Sheffer en su libro “Los niños de Asperger” como resultado de sus investigaciones encontró documentos que niegan que este famoso Dr. se haya resistido al régimen Nazi.
Los documentos encontrados revelan los experimentos médicos del régimen nazi a niños que nacieron con alguna discapacidad.
Este famoso Dr. fue una pieza fundamental de la política de
exterminio del Tercer Reich.
Durante mucho tiempo se creyó que Asperger fue una persona
que se resistió al Tercer Reich pero su trabajo estuvo vinculado al auge del
Nacismo y de sus mortales programas científicos.
El lugar de los experimentos científicos era el centro de
rehabilitación de Am Spiegelgrund. En este lugar fueron sometidos los niños a
tratamientos dónde a los pocos días encontraban la muerte.
Lo peor de todo que habían padres que estaban de acuerdo con
los métodos y tratamientos que se aplicaba en este lugar.
“Durante los primeros años del programa, los oficiales
clasificaron a la mitad de las víctimas como ‘débiles mentales’, a un cuarto
con esquizofrenia y al siguiente porcentaje mayor con epilepsia”, escribe la
autora. “
Estos padecimientos eran las categorías principales por las
que se podía condenar a muerte a un niño o un adulto.
El Dr. Hans Asperger, cuyo apellido se inmortalizó por dar
nombre a una condición dentro del Espectro Autista, con su conocimiento y actuar,
contribuyó a dar muerte a decenas de personas que formaron parte de los
programas de eugenesia y eutanasia desarrollados por el régimen Nazi.
El exterminio de niños fue el primer sistema de homicidio en
masa del Reich.